Mantener un hogar limpio no solo tiene beneficios estéticos, sino también de salud, bienestar y organización. Sin embargo, no todas las limpiezas son iguales: existen distintos tipos de limpieza en función de la frecuencia, la profundidad o el objetivo que se busque.
En este artículo te mostramos los principales tipos de limpieza de casa, sus características, cuándo conviene aplicarlos y qué tareas incluyen.
Es la más básica y la que mantiene la casa habitable y ordenada en el día a día.
Incluye:
👉 Beneficio: evita la acumulación de suciedad y mantiene el hogar funcional sin grandes esfuerzos.
Se realiza normalmente una vez por semana para mantener la higiene de la casa.
Incluye:
👉 Beneficio: mantiene un equilibrio entre orden, limpieza e higiene general.
Es más exhaustiva y se realiza cada mes o cada pocos meses.
Incluye:
👉 Beneficio: llega a rincones que no se limpian a diario, evitando acumulación de suciedad.
Se hace pocas veces al año, normalmente al cambiar de estación (primavera/otoño).
Incluye:
👉 Beneficio: prepara la casa para los cambios de clima y de rutina.
Especialmente intensa, se hace en viviendas nuevas, tras reformas o antes de entrar a vivir.
Incluye:
👉 Beneficio: asegura un espacio habitable, higiénico y libre de residuos de construcción.
Enfocada en usar productos naturales y métodos amigables con el medio ambiente.
Incluye:
👉 Beneficio: más saludable para quienes conviven en casa y mejor para el planeta.
Se enfoca en eliminar bacterias, hongos y virus, especialmente en baños, cocinas o tras enfermedades.
Incluye:
👉 Beneficio: previene contagios y mantiene un ambiente saludable.
Cuando no se dispone de tiempo o se busca un acabado más completo, se puede contratar a una empresa o persona especializada.
Incluye:
👉 Beneficio: ahorro de tiempo y garantía de resultados profesionales.
En 2025/2026, los tipos de limpieza de casa más comunes son: diaria, semanal, profunda, de temporada, post-obra, ecológica, de desinfección y profesional.
Cada una cumple un objetivo distinto, desde el mantenimiento básico hasta la higienización completa. Lo ideal es combinarlas: realizar una limpieza ligera diaria, una semanal más profunda y al menos una general cada pocos meses, reforzándola con profesionales cuando sea necesario.
Un hogar limpio no solo se ve bien: también aporta salud, bienestar y armonía.